Reseña

A través de un viaje imaginario, Jesús Urzagasti nos invita a presenciar cómo podrían entrelazarse las vivencias de aquellas personas que habitan el mundo de los muertos. Emergiendo desde la tierra del mistol y de muchos otros parajes, surgen peculiares personajes que bien podrían entablar interminables charlas, posibles romances, encendidas discusiones, con otros que no conocieron e incluso pertenecieron a otra época.
Cada experiencia es un hilo que teje innumerables posibilidades, desdeñando toda lógica e invitando a recorrer un sendero misterioso e irresistible. En este mundo nos alejamos de lo sepulcral y silente para descubrir cómo sus habitantes escapan del tiempo y de la soledad, llevándose secretos y misterios no imaginados y llorando con cantos luminosos en las noches de lluvia.
De la ventana al parque, nos permite transitar entre un mundo terrenal y otro desconocido, que es develado por su autor, en el que los muertos tienen su propia esencia y movimiento. Es un camino que propone adentrarnos en este mítico espacio.