Reseña

El detective Tomás Gotze recibe un video enviado a su correo electrónico. Es un adicto a su computadora: el único amor que le queda tras haberse separado de su familia hace ya buenos años. Cree, con inobjetable emoción, que el video es y solo puede ser algo apasionante. Alguna sorpresa agazapada en las redes. Pone "play" con la inmensa curiosidad que lo envuelve y el resultado es distinto, ¡muy distinto! a lo que creía: una mujer enmascarada prende fuego al cuarto donde se encuentra el exalcalde Cañizares. Esa mujer habla a Tomás con absoluta confianza: sabe su nombre, sabe dónde vive, sabe a qué se dedica. Aquella salvaje asesina sabe, a detalle, quién es Tomás. ¿Cómo lo sabe? Es esa interrogante que domina la investigación del detective Gotze, quien debe atestiguar a lo largo de dos años el inclemente asesinato de otros cuatro exalcaldes. Aquella mujer se llama Andrea, una criminal carente de toda compasión. ¿Por qué asesina como lo hace? Ese es el hilo conductor de esta novela que entrelaza las vidas de Tomás y Andrea. ¿Se conocen? Ella sí lo conoce, él jura no conocerla. Él es un hombre solitario y triste que persigue a ocultas a Daniela, su exesposa, visita de noche a mamá sin que ella lo sepa y dedica horas a encontrar pistas sobre esa despiadada magnicida. No va a ser fácil.