Presencia de carbono orgánico en terrenos de aptitud forestal de Pinus Radiata D. Don
Autor: | Ruiz Ramos, Mario |
Parte de los problemas que arrastra el planeta ha sido consecuencia de los diversos desastres que ha dejado a su paso el hombre y su acelerado progreso lo que ha traído no solo enormes daños a la tierra, sino que ha propiciado una cultura de la destrucción, razón por la cual el planeta no solo se ha visto afectado de forma directa, sino que los efectos contaminantes han aumentado provocando problemas ambientales, así como cambios climáticos. De acuerdo con numerosos estudios, desde finales del siglo XIX, la concentración de CO2 en la atmósfera ha aumentado en un 25%, producto no solo de la combustión de restos fósiles que se emplean en la actualidad para la industria y sus derivados, sino también para la deforestación que es otra de las formas más abruptas de contaminar.
Una de las causas de este desequilibrio manifiesto es lo que se conoce como concentración de CO2 que es liberada en la atmósfera en el proceso de fotosíntesis, no obstante, para revertir este proceso, es importante, de alguna manera, retomar los procedimientos que habitualmente se llevan a cabo como por ejemplo, el uso que en la actualidad se le están dando a los suelos en los procesos de cultivos y plantación, con lo cual estaría no solo contribuyendo al saneamiento de la atmósfera, sino que también estaría desacelerando el efecto invernadero, causante del calentamiento global, entre otros disturbios ecológicos.
En las últimas décadas, la preocupación no solo ha sido de parte de algunas naciones, sino que se ha convertido en una de las preocupaciones a escala global, lo que hace que el problema no sea solo abordado por un pequeño sector de la población, sino que se ha extendido a otros escenarios. Frente a este drástico panorama, el presente libro de investigación se ha enmarcado no solo dentro de los pactos internacionales, así como convenios, con el propósito y el objetivo de contribuir con el planeta, en la reducción de gases de efecto invernadero, causantes, como ya se ha dicho, del cambio climático, entre otros fenómenos que han causado desastres y destrucción.
Buena parte de los mecanismos que se pretenden desarrollar se encuentra, precisamente, la captura de estos gases en la biomasa vegetal para que de este modo se logre una mayor concentración de carbono proveniente de las plantas y desechos forestales, y de este modo, desacelerar el proceso contaminante que logra alojarse en la atmósfera. Esta acción, que forma parte de los objetivos planteados no solo logrará que el efecto invernadero no logre manifestarse del todo, sino que contribuye al saneamiento ambiental, además de otros beneficios para el planeta.
Es por ello por lo que se hace imperativa la necesidad de conocer, como parte de los mecanismos de trabajo las estrategias que se necesitan saber, asimismo, cómo y de qué manera, funciona el carbono en el suelo, entre otros aspectos, con el fin de lograr mitigar los efectos contrarios que den resultados inesperados e incluso adversos.