Ojos del cuerpo
Rosario es una poetisa que cultiva el género erótico, que escribe, como dice ella, sin pensar, porque así lo siente. Y tal vez ése sea su mayor logro, pues cuando se lee a Rosario Aquím siente uno precisamente esa pulsión del erotismo –a flor de piel-, del registro de nuestra propia piel, a veces imperceptible, a menos que el otro la despierte; el juego de los espejos, el verse a sí misma o la otra mirada sobre uno mismo, el atreverse, inclusive, a romper con los cánones sociales para ser uno y el otro a la misma vez.