Reseña

Dentro de la narrativa de Jaime Saenz, La piedra imán se destaca por su carácter autobiográfico. Ciertamente, mucha de su obra narrativa presenta marcados rasgos autobiográficos. Incluso en algunos de sus libros Saenz se incluye a sí mismo como personaje, tal el caso de Los cuartos. Pero en La Piedra imán la intención es obvia y explicita. Hay textos en este libro que se caracterizan por una mirada objetiva –hasta donde puede ser objetivo un escritor escribiendo sobre sí mismo- a importantes épocas de su vida. Así, en las páginas iniciales tenemos una hermosa imagen poética de la madre y de la niñez de Saenz, y más adelante una descarnada relación de sí mismo cuando iba “de la mano del alcohol”. Junto a estos momentos autobiográficos, no deja de haber, como es común en su narrativa, personajes entrañables, mágicos, llenos de humor y profundamente paceños, como el pianista ciego que no sabe si toca el piano con el alma o con las manos, o Napoleón U. Oporto dueño de una famosa bodega.